Las heridas abiertas que deja la crisis de Gobierno: la soledad de Ábalos, la desazón de Iceta y Celaá y el ‘dardo’ de Bolaños

Ningún miembro del Consejo de Ministros acudió a la despedida de Ábalos. Iceta confesó públicamente «sentir mucho» dejar Política Territorial.

La inesperada crisis de Gobierno ejecutada por Pedro Sánchez, tanto por el momento elegido como por el calado de la misma, ha dejado una heridas que 48 horas después de que se activara el botón rojo siguen sangrando. La tradicional jornada del traspaso de carteras plasmó que aún no hay cicatrices. Mensajes velados, intencionados de ministros y ya ex ministros en forma de ‘dardos’. Constataciones de que muchos de los ‘sacrificados’ ni querían irse ni se lo esperaban.

La salida de José Luis Ábalos, inesperada por todos, es uno de los asuntos que aún entraña incógnitas tanto en el Gobierno como en el PSOE. Había expectación por saber cómo había digerido el ya ex ministro de Transportes su salida. También abandonará la secretaría de Organización del PSOE. El partido respeta sus tiempos y que sea él quien lo comuniqué, pero ya trabaja son contar con él, con Adriana Lastra asumiendo poderes «plenipotenciarios» y apoyándose en Santos Cerdán.

Ábalos no mencionó al presidente del Gobierno en sus agradecimientos. Circunstancia que llamó la atención, sobre todo si se contrapone con otro peso pesado del Gobierno y del PSOE que dice adiós: Carmen Calvo. La ex vicepresidenta primera centró su despedida en halagar la figura de Félix Bolaños, su sucesor al frente del ministerio de Presidencia, pero sí quiso tener un recuerdo para Sánchez: «Me voy con el agradecimiento infinito a Pedro Sánchez por haber depositado en mí la posiblidad de vivir un aprendizaje no sólo político, si no humano». Y añadió: «Yo me voy agradecida y tranquila».